La película, un embole, completamente pueril, incluso para un film de terror sobrenatural, con grandes dosis de histeria y sobreactuación general. Los rituales deben ser de lo más gráficamente ridículo que he visto últimamente en un film que, de yapa, se toma demasiado en serio a sí mismo, lo cual aumenta su patetismo. Como llegó esto a ser la película más taquillera de Corea, es un profundo misterio. O tal vez no.

Yo esperaba que pudiera ser algo similar a The Wailing (Na Hong-Jin, 2016) (que ésa sí me encantó), pero nada. De esta "Exhuma" el inicio me estaba agradando, pero cuando se mostró el "componente japonés" fue desde mi punto de vista ya todo a peor.

Respecto a ser la película más taquillera de Corea del Sur, mismamente recuerdo algo parecido con The Admiral: Roaring Currents (Kim Han Min, 2014), que también tuvo una buena recaudación, quizás sea el "componente japonés" que ha dejado una evidente huella en Corea la que les arrastre allí, similar a España con la Guerra Cívil (en Europa con la II Guerra mundial, etc.), este tipo de cicatrices tienden a sobresaturar la producción, al margen que dentro de cada una las haya también mejores o peores películas. Personalmente la taquilla no es un elemento que considere en cuenta.